BIENVENIDA RED SUR – MUJER

Desde la Fundación Oscar Alende (Fundal) queremos darle la bienvenida a Red Sur – Mujer como programa asociado a nuestra institución.

Venimos trabajando hace años con distintas áreas y programas como el Programa Fundal Migrantes, el Área Audiovisual y Comunicacional, el Área Medioambiental, el Área de Políticas Urbanas, Regionales e Internacionales (en la que creamos el Irripas, Instituto de Relaciones Internacionales Para el Ámbito Subnacional) y el Programa Derechos Humanos en la Región. Nos enorgullece poder colaborar en conjunto a partir de ahora con el Programa Red Sur – Mujer, cuyas integrantes vienen desde hace varios año trabajando en aportes teórico prácticos al campo de las políticas públicasdestinadas a lograr igualdad de derechos y respeto a la diversidad.

Entre los objetivos estatutarios de nuestra Fundación se encuentra el de Promover la investigación y estudio de políticas públicas, estudios sociales, económicos, sociológicos y culturales, aplicables al Estado Nacional, Estados Provinciales, Municipales o sus Organismos Descentralizados así como el de Intervenir directa o indirectamente en programas propios o de terceros que traten temas políticos, sociales, económicos o culturales que acudan a la formación de modelos de políticas públicas para el progreso de la Nación.

La igualdad entre los géneros y el empoderamiento de las mujeres es uno de los 17 Objetivos que aprobó la ONU en 2015 en su Agenda 2030sobre Desarrollo Sostenible. Recordemos que aún hoy al menos 200 millones de mujeres y niñas que en 30 países fueron sometidas a la mutilación genital femenina; que en 18 países los esposos pueden impedir legalmente que sus esposas trabajen; en 39 países, las hijas y los hijos no tienen los mismos derechos de herencia; en 49 países no existen leyes que protejan a las mujeres de la violencia doméstica; que una de cada cinco mujeres y niñas han sufrido violencia física y/o sexual por parte de una pareja íntima, durante los últimos 12 meses y que, sin embargo, en 49 países no existen leyes que protejan específicamente a las mujeres contra tal violencia; que su representación en los parlamentos nacionales es, en promedio, de apenas un 23,7%  y que solo el 52% de las mujeres casadas o en una unión, toman libremente sus propias decisiones sobre relaciones sexuales, uso de anticonceptivos y atención médica.

No está demás repasar las metas que las Naciones Unidas se propusieron en función del Objetivo antes mencionado: “1.- Poner fin a todas las formas de discriminación contra todas las mujeres y las niñas en todo el mundo. 2.- Eliminar todas las formas de violencia contra todas las mujeres y las niñas en los ámbitos público y privado, incluidas la trata y la explotación sexual y otros tipos de explotación. 3.- Eliminar todas las prácticas nocivas, como el matrimonio infantil, precoz y forzado y la mutilación genital femenina. 4.- Reconocer y valorar los cuidados y el trabajo doméstico no remunerados mediante servicios públicos, infraestructuras y políticas de protección social, y promoviendo la responsabilidad compartida en el hogar y la familia, según proceda en cada país. 5.- Asegurar la participación plena y efectiva de las mujeres y la igualdad de oportunidades de liderazgo a todos los niveles decisorios en la vida política, económica y pública. 6.- Asegurar el acceso universal a la salud sexual y reproductiva y los derechos reproductivos según lo acordado de conformidad con el Programa de Acción de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo, la Plataforma de Acción de Beijing y los documentos finales de sus conferencias de examen. A.- Emprender reformas que otorguen a las mujeres igualdad de derechos a los recursos económicos, así como acceso a la propiedad y al control de la tierra y otros tipos de bienes, los servicios financieros, la herencia y los recursos naturales, de conformidad con las leyes nacionales. B.- Mejorar el uso de la tecnología instrumental, en particular la tecnología de la información y las comunicaciones, para promover el empoderamiento de las mujeres. C.- Aprobar y fortalecer políticas acertadas y leyes aplicables para promover la igualdad de género y el empoderamiento de todas las mujeres y las niñas a todos los niveles.”

Ninguna de estas metas será posible cumplir sin el compromiso, la participación y la lucha permanente no solo de las mujeres, sino también de instituciones y organismos que tomen conciencia de la injusticia que significa la desigualdad en todas sus formas. En un contexto social, económico y cultural que parte de una histórica postergación de las mujeres y que responde a una ideología dominante – machista o patriarcal – que concibe las relaciones entre hombres y mujeres como de subordinación, nuestro trabajo en es, en principio, reconocer que partimos de una situación de desigualdad estructural. Por lo tanto el objetivo de la igualdad debe pasar necesariamente por corregir esta situación de desigualdad de la que partimos.

Es por todo ello que le damos la bienvenida a la Red Sur – Mujer, saludando la participación comprometida para tomar conciencia y transformar la posición de desigualdad y subordinación que las mujeres han vivenciado a través de siglos de historia tanto en materia familiar, como económica, social, política, cultural, teniendo presente que las circunstancias de clase social, edad, etnicidad, orientación sexual o identificación religiosa pueden agravar o acentuar estas desigualdades. Se trata, en definitiva, no solamente de constatar esas desigualdades y discriminaciones, sino de actuar en los distintos niveles para conseguir equidad e igualdad.

Gonzalo Tomás Pérez

Presidente de la Fundación Oscar Alende (Fundal)